domingo, 17 de abril de 2011

cuatro

4

Cuando íbamos a la altura de Talca fue que paramos en una gasolinera. Pablo estaba cansado ya de manejar y era el turno de mi mami. Pablo no quiso ni ir al baño, Odette bajó a mojarse la cara y tomar un café para lo que quedaba de noche y recorrido. Yo también bajé al baño, pero no tomé café porque me pareció que los precios eran inmorales.

Es cierto que eran las 3 de la mañana y que dónde iba yo a sacar ramitas que bajonearan, pero lo cierto es que no me interesa pagar tanto dinero por tan poca comida.

Cuando seguimos el viaje ya Pablo estaba durmiendo. Buscamos alguna radio y al rato encontramos la Pudahuel. En un momento Odette me dice que trate de que nadie me vea fumando cuando estemos en Los Ángeles, le digo que obvio y pienso en el caño y medio que ando trayendo y en las posibilidades de indagar los recovecos del hospital, un hospital que desconozco pero imagino antiguo y lleno de patios con hojas cayendo de arboles de otoño. imagino el crujir y el olor de las hojas, junto a la gruta y una pequeña parroquia en la que si es que se muere mi abuela y la velan, podría cumplir mi cometido.

También pienso que tuve suerte, porque los porros están buenos y eso que no había nadie en el pasaje y tuve que comprar en la última casa, a la que le tengo menos fe porque siempre hay un guatón culiao que es hijo de la señora que vende y los corta por la mitad para quedarse con el dinero. Pero no fue el caso, estaban grandes y tóxicos, una delicia para el paladar.

Pero quedaba uno y medio, no era mucho como para hacer alarde. Vamos pasando Linares.

sábado, 16 de abril de 2011

dos

2

pedir permiso para viajar, preparar sanwichs, huevos duros y bebidas. La idea es no gastar. Basta con los peajes y la bencina. Es que además no sabemos por cuanto tiempo vamos, como estará la abuela, si será verdad que está muriendo. Es que como nunca hablamos.

jueves, 14 de abril de 2011

work in progress

prescriptum.

yo quería que esto fuera un reportaje. pero la historia de mi familia, de esta parte de mi familia, no es tan entretenida como para eso.

1

Esa noche llegué a mi casa como a las nueve de la noche, venía del liceo en el que apenas empezaba a trabajar, muy a mi pesar, motivado por las deudas que acarrea mi familia. Mi madre, mi hermano y yo debemos mucha plata, estamos endeudados.

Yo ya sabía lo que pasaba, tenía que ser algo grave para que me llamaran al trabajo, digo. Era mi abuela. La mamá de mi papá estaba muriendo. Mi papá murió hace diez años. 

Decir que desde entonces no nos vemos sería exagerado, pero casi. Más bien se podría decir que son parientes. Desconocidos borrosos en recuerdos de infancia y campo.

-Tómalo con Andina, dijo David Joel, mi tío, el día de la muerte de mi padre.

No es que les tenga rencor, de hecho no entiendo bien porque escribo en plural cuando hablo de... eh... ellos. Los conozco tan poco que apenas los distingo.

La cosa es que mi abuela Rosa Amelia se está muriendo. Ella vive en Los Ángeles. Santa María de Los Ángeles. Los pagos de mi papi, donde quería que echar raíces. Tierra. La escuela para contador, la cancha en el bajo, el mausoleo de la Sociedad de Socorros Mutuos de Obreros de Los Ángeles, la plaza de Antuco con su barco incomprensible en plena cordillera, la siesta en Chacayal.

Venía llegando del liceo. teníamos que ir a Los Ángeles, con Odette y mi hermano.

lunes, 4 de abril de 2011

peda

sentado en los pastos del peda / evadiendo las horas de permanencia / en esa sala de profesores enfermos / en los pasillos elevados que retumban / en la cotona blanca que me cubre.

martes, 29 de marzo de 2011

es que hay cierta ternura en el desdén
una ternura inhóspita
en la que no se puede residir

jueves, 24 de marzo de 2011

estado de cuenta

Ha pasado tiempo, ya no soy cesante, ahora trabajo en un liceo.

Pero no es excusa para no poner cosas en el blog.

El punto es que lo escrito -que no es mucho- se ha ido guardando para un eventual libro, aunque hoy hay dos posibilidades: reeditar letra chica con algunas correcciones o derechamente atacar un texto nuevo que está aún en pañales. De todos modos no son temas excluyentes, pero hay q tener claro que desde la nueva política editorial de libros del perro negro no cabe más de un libro por año por autor.

Conversamos anoche con el ioshi y acordamos ponerle patitas a lo de Maori y Marcela, el otro de poesías me tinca q es letra chica y hay tb unas narraciones de un sociólogo sobre erre a pé que podrían aparecer hacía Junio/Julio y con eso cerramos el primer semestre.

este fin de semana el colo juega contra el audax y mi apuesta es porque ganan los albos, ojalá pierda ese ioshi.

jueves, 10 de marzo de 2011

falleció la piedra

es cierto que ya estaba un poco podrida,
pero ningún perrito merece tan mal morir,
sin que nadie se preocupe,
siquiera por saber como andas.

las perras chicas parecen estar mejor de los problemas cutáneos
todos mueven la cola
y en el patio de las perras la vida sigue igual que siempre
incluso pareciera que un poco mejor.

:-(

lunes, 7 de febrero de 2011

chile's dead baby, chile's dead*

(igual que todos sus poetas)
de ellos ni hablar
el plan es destruir la poesía
torturarla
hasta que sangren los lusers
que sufran
lo están pidiendo a gritos
los fucking masocas

hay que hacer algo más grande
basta de leer

*de una conversación con S. Llach

miércoles, 22 de diciembre de 2010

ARQUEOLOGÍA DE UN CARIÑO


insistí tanto (en)
verte
y lo imaginé (de al menos)
1000 formas
pero estás (cansada)
y tienes (sueño)
nada malo
el error es la esperanza,
el entusiasmo.

distancia,
una distancia grande nos separa
y solo queda leer
en silencio
o mirarte viendo tele mientras duermes.

martes, 21 de diciembre de 2010


No comas nada que no estés dispuesto a matar,
no mates nada que no estés dispuesto a comer,
no mates,
no comas.

Al carajo los vegetarianos, todos los dioses son carnívoros.

Laura Chase

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Pobreza y dolor

Por elías hienam

Diez portazos por minuto en las manzanas que no rodean, mientras caminamos, por San Miguel. Portazos y gente corriendo que llora desconsolada, abrazos. Los pastores que guían oraciones con las manos en alto y a todo sol, parecen ser los únicos cuerdos en medio de la incomprensible vorágine policial de órdenes, contraórdenes y desconcierto.
Ochenta y un víctimas fatales -correspondientes al cuarto piso de la torre 5 sur, habitada por reos primerizos rematados sin derecho a beneficio1-, explican el desconsuelo de las más de mil personas que se agolpan en Ureta Cox con San Francisco.
Como el sector incendiado da a la calle, decido ir a dar una vuelta antes de meterme en el perímetro acordonado para las autoridades y la prensa. Toda la vida me ha impresionado la relación a grito pelado entre los presos en sus ventanas con sus parientes junto a la reja.
A este precario sistema de comunicación, se suma la desesperación ante la escasa información de la que se dispone. Algunos presos sacan sus brazos y saludan. Al menos dos familias sienten alivio con un sólo saludo que responde a la polifonía callejera.
El audio de esos gritos debiera estar en las radios y no los lamentos, explicaciones y respuestas de las autoridades. ¿qué se le puede decir a la madre de un joven privado de libertad, bajo custodia de los gendarmes, que no sabe si su hijo está muerto?
Los funcionarios de la ANFUP hablan del hacinamiento, los detectives, encargados de la identificación de los cuerpos calcinados saludan con cara de espanto a sus colegas que les ofrecen agua. El presidente anuncia cárceles modulares, los diputados comunistas dicen que esto es por culpa de la alta tasa de encarcelamiento, el ministro Morandé se retira en el mismo zorrillo que luego trajo a los honorables, la encargada de prensa anuncia puntos de la misma cada una hora.
Un funcionario del penal sale con una lista y anuncia a los que están vivos, a los que quedaron de la torre cinco sur, la lista de los fallecidos se desprende por ausencia aunque llaman a no perder las esperanzas, pues al parecer hay otros cinco reos en la guardia.
Luego de la lectura de la lista (a través del parlante de un chanchito de tierra o cuca policial), la desesperación se hace evidente e incluso se insinúan algunas escaramuzas, pero el horno no está para bollos, la gente no sabe a quien responsabilizar, contra quien tomársela y mantiene el compás de espera.
Pobreza y dolor junto a la plaza Madeco, pobreza y hacinamiento al interior de los penales, helicópteros, sirenas, ambulancias y vehículos del SML listos para llevarse los cuerpos mientras aparecen los rostros ancla de los canales: Nuñez y Repening por ahora, el resto debe venir el camino, hasta viene el presidente, pobreza.
Poco a poco, los parlantes comienzan a llamar a los familiares de aquellos reos que fallecieron por asfixia y no calcinados, que son los únicos identificables.
A medida que entran a reconocer los cuerpos y salen con el rostro desencajado, los colegas de la prensa sangrienta no trepidan en poner sus micrófonos infectos en el rostro de los deudos que achinados hablan de la vida de sus muertos. “Íbamos a tener una casa, le faltaba poquito pa' cumplir la condena”, escenas de intenso dolor, rematan los colegas al unísono.

martes, 30 de noviembre de 2010

Cosas notables de 'Criminal' de Jaime Pinos

Primera carta a los poderes

Señor Ministro del Interior:

Usted habla de mi vida
como si hubiese elegido dedicarla a delinquir.
Pero se equivoca.
Yo quería hacer algo con ella.
Tenía aspiraciones, tenía proyectos.
Nunca quise este final,
todo el horror,
todas esas muertes.
Alguna vez imaginé las cosas de otra forma.
Los delitos que cometí
fueron para mejorar el remedo de vida y de familia que tengo
sin embargo, todo fue inútil.
todo sucedió como si estuviera escrito.
Hasta llegar a la soledad de este cubículo
donde la luz permanece encendida
día y noche
mientras el tiempo no pasa
y lo mejor que puedo esperar de la vida
es una muerte rápida.

Usted habla del crimen
como si fuese un vicio que algunos practicamos
por una especia de abyección congénita
o de desafío antisocial a las reglas de la colmena.
Pero se equivoca.
El criminal no nace, se hace.

Y el camino de la abyección es un largo aprendizaje
que, para muchos como yo, coincide con el de la supervivencia.
Ser un individuo útil para la sociedad.
Lo intenté.
Nadie quiso contratarme por mis antecedentes.
Sesenta lucas.
Eso es todo lo que pude llegar a ganarme honradamente.
Es la sociedad la que nos rechaza, Señor Ministro.
Es esta colmena la que, como a zánganos, nos desecha por inútiles.

Finalmente,
aunque hoy sea acribillado
por quienes en algún momento me exaltaron
y sea una vergüenza nacional,
le recuerdo Señor Ministro,
que soy parte del producto interno de esta sociedad.

Aunque usted,
desde la cómoda oficina en que se encuentra,
jamás entenderá.

Desde las alturas del poder,
nunca podrá siquiera imaginar
lo que es la vida
acá
en los bajos fondos.


Segunda carta a los poderes

Señor Juez:

Como sabe,
hace algún tiempo le solicité a mi abogado
códigos y otros textos legales
que he venido estudiando para planificar mi defensa.
Déjeme decirle que sus últimas resoluciones me tienen muy molesto.
Entre otros cargos usted me ha procesado por el delito de secuestro.
Ha cometido un grave error.
Lo que correspondía, en derecho, era la figura de robo con violación.

Aunque poco importa a estas alturas.
He sido delincuente desde niño,
alguna vez creí que el Sistema Judicial estaba para aplicar justicia.
No para secar individuos en la cárcel.
Tengo 26 años.
La mitad de ellos los he pasado preso.
ahora sé que,
culpable o inocente,
una vez dentro de esta trampa ya nunca más se sale.
Nunca.

De cualquier forma,
quiero agradecerle que me haya tratado
como a un ser humano.
No como a un animal peligroso
o un monstruo de feria.
Le agradezco también la máquina de escribir.
Ha sido de gran ayuda para la redacción de La Obra.


Discurso del perdón

No pido perdón.

Los delitos que cometí
fueron atroces, lo sé.

Pero sé también
que ningún gesto de arrepentimiento
va a mitigar
el dolor de las víctimas.

Que el daño es irremediable.

Yo soy el que no tiene perdón.
Yo soy el condenado.

---

*_+
que tremendo!

jueves, 25 de noviembre de 2010

Snob #33 Ariel Zuñiga



En esta edición, correspondiente al 14 de Octubre, Ariel Zuñiga visita el bunker de snob con un entertenido análisis de la situación política chilena. este programa es todo un documento de contingencia y pese al paso del tiempo, no pierde actualidad ni humor. 

jueves, 4 de noviembre de 2010

dónde

hoy llegué a las 3 y media de la mañana, mi mamá me recibió con suchi y luego vi documentales de colo colo, acompañando a mi perro q está mega dopado (con tramadoles)

por primera vez en mucho tiempo, con el can en franca mejoría, siento que tengo un lugar en el mundo